«Corrupción en la Federación» es el nuevo cantico en el Bernabéu en las últimas dos temporadas. También se ven pancartas con el mismo lema.
La intervención ayer de la UCO de la Guardia Civil, en coordinación con la Fiscalía Especial contra la Corrupción y la Criminalidad Organizada (y el apoyo de Europol), con registros en la sede de la Real Federación Española de Fútbol y el domicilio de Rubiales en Granada, con siete personas detenidas, confirma que en el Bernabéu sabemos lo que cantamos. No como en otros estadios donde tanto dentro del mismo como en sus aledaños proliferan los cantos racistas dedicados a nuestro Vinicius. Incluso cuando no juega como sucedió en el pasado Atlético de Madrid 0 Barcelona 3 donde antes del inicio del partido lo llamaron chimpancé.
Todo muy edificante. Los terraplanistas del fútbol son así… Mientras tanto seguiremos con el «Corrupción en la Federación».
En el sorteo de octavos de final de la Copa del Rey habrá un derbi: el Atlético de Madrid recibirá al RealMadrid. Será la semana que viene. Y se da la circunstancia que ambos se enfrentarán dos veces en siete días porque este miércoles juegan la semifinal de la Supercopa en Arabia Saudita.
Hoy conocíamos que la Federación premiaba a Alberola Rojas otorgándole la semifinal, tras su desastroso partido de Liga (el único que ha perdido el Madrid esta temporada, gracias a los errores arbitrales y de Ancelotti; los del entrenador se pueden corregir, no así los del árbitro). Así que asumo que el de octavos de Copa lo pitará Burgos Bengoetxea. Es lo suyo, visto cómo se las gastan los jerifaltes del fútbol español.
El Villarato a juicio: el titular del Juzgado de Instrucción nº. 1 de Barcelona, Joaquín Aguirre, imputa al Barça por cohecho. Textualmente la resolución dice «“El delito de cohecho se ha consumado al haberse realizado el pago, se demuestre o no la corrupción sistémica del arbitraje español a causa de tales pagos”. También inicia investigación a Enríquez Negreira y su hijo y a los expresidentes azulgranas Josep María Bartomeu y Sandro Rosell. Este nuevo auto se suma a los delitos denunciados por la Fiscalía y admitidos a trámite en marzo de este año. Relevo y la SER resumen bien la situación actual y aportan contexto e implicaciones ante este giro legal, que agravaría la situación para los implicados (y al ser cohecho -soborno- podría incluso salpicar a las presidencias de Gaspart y la primera de Laporta, que actualmente figuran como prescritas).
En una acción paralela el juez Aguirre ha ordenado a la Guardia Civil registrar la sede del Comité Técnico de Árbitros de la Federación Española de Fútbol. La drástica medida ha sido a consecuencia del toreo federativo ante sus requerimientos de documentación. O no la mandaban o tardaban y además era incompleta.
No estábamos locos los madridistas que hablábamos del Villarato. Cuando hace años Relaño lo explicó se quedó corto (Teoría general del Villarato, 2011). Nadie podía imaginarse entonces que sería algo tan grave y continuado en el tiempo. Una maquinaria bien engrasada. Hoy el Villarato y lo que representa está en los tribunales. El Rubialato también, en tiempo récord gracias a la selección femenina campeona del mundo.
Ahora que Rubiales finalmente dimitió queda por ver qué sucede con los quintacolumnistas de la RealFederación Española de Fútbol. Porque haberlos los hay. Es la única explicación a diferentes situaciones que se han producido en la Federación en estas tres semanas. Las transcurridas desde la final del Mundial femenino.
Hay dos nombres obvios que despiertan todas las sospechas, pero no creo que los tiros vayan por ahí. Y no han tenido intervención en los hechos que señalaré en los siguientes párrafos. El primer nombre podría ser el de Pedro Rocha, presidente interino de la Federación. Hombre de confianza de Rubiales quien designó que fuese su sucesor temporal, porque pensaba que volvería. Sus decisiones respecto a las situaciones que detallaré serán el termómetro para juzgarlo. Montse Tomé, nueva seleccionadora de las campeonas del mundo, podría ser otra persona señalada. Segunda de Vilda ha tomado su relevo. Rubiales en la Asamblea Extraordinaria la señaló. Tras subir públicamente el sueldo de Vilda la nombró directora deportiva (cargo que Vilda simultaneaba con el de seleccionador). A ella se la vio incómoda con el anuncio. Las dos mujeres que se sentaban a su derecha e izquierda tenían mala cara. Al ver a su jefa aplaudir, tímidamente y por compromiso, se sumaron no muy convencidas. Fue más un gesto de solidaridad por la promoción de su jefa.
Toca ir al grano y repasar las situaciones tan sospechosas como flagrantes. La primera se produjo la misma noche del triunfo. La Federación emitió un comunicado con unas declaraciones inventadas atribuidas a Jenni Hermoso. ¿A quién se le ocurrió inventarse las palabras de la futbolista? ¿Quién dio la orden? ¿Quién redactó el comunicado? ¿Quién dio el visto bueno a su distribución? De momento no se han depurado responsabilidades. Recordemos que Rubiales aún era el presidente. En mi opinión este es el detonante de todo lo que vino después y encaja perfectamente en la suicida estrategia seguida por Rubiales. Y conviene no olvidar los insultos de Rubiales a quienes osaron criticarlo esa noche (aquí está claro que el responsable ha pagado).
Ya sin Rubiales, suspendido 90 días por la FIFA, el secretario general de la Federación Andreu Campsenvió un escrito a la UEFA denunciando al gobierno español por intervencionismo. De prosperar los clubes españoles corrían el riesgo de ser suspendidos de las competiciones internacionales. La denuncia se produjo después que el Consejo Superior de Deportes anunciase que elevaría el caso Rubiales al TAD y sucedió antes del nombramiento de Rocha. Queda claro que a la acción siguió una reacción. ¿Camps actuó por su cuenta y riesgo? ¿O alguien se lo susurró? La continuidad o no de Camps desvelará muchas actitudes.
Camps y Miguel García Caba eran colaboradores directos de Rubiales. El abogado García Caba tiene una trayectoria singular que pueden leer aquí. Director de Integridad de la Federación cayó en desgracia ante Rubiales y recuperó su confianza tras entrevistarse con JavierTebas, jefe de la patronal del fútbol, y grabar la conversación. El tercer personaje de la máxima confianza de Rubiales es Medina Cantalejo, el jefe de los árbitros. Su manera, igual que la de Rubiales, de gestionar el caso Negreira es bochornosa. Y provechosa para ellos. La continuidad de estos tres dará pistas de si estamos ante una operación de maquillaje o se van a intentar cambios más profundos.
Después de la digresión del párrafo anterior toca volver a los hechos que atribuyó a los quintacolumnistas. Esta semana hemos vivido dos. Primero el asunto de las botas de los futbolistas de la selección masculina. Cuando llegaron a Georgia descubrieron que no habían facturado las botas de los jugadores. Se habían quedado en Las Rozas (en la sede de la Federación). Tuvieron que fletar un avión privado para que el equipamiento llegase a tiempo para jugar el partido de clasificación de la Eurocopa. No recuerdo que esto haya pasado jamás. Se puede bromear que estas cosas no pasaban con Rubiales. Tampoco con ninguno de sus predecesores. Este descuido, o dejadez si así lo prefieren, es de lo más sospechoso. Como lo es el otro incidente de la semana, que afecta a la selección femenina campeona del mundo. La nueva seleccionadora tiene como reto la primera edición de la Liga de Naciones femenina. En pocos días la nueva seleccionadora debe dar la lista definitiva (la primera jornada se juega la semana que viene). Antes hay un procedimiento administrativo a seguir por la Federación: avisar a los clubes involucrados para que las jugadoras preseleccionadas estén avisadas. Hay unos plazos. No se cumplieron. ¿Otro descuido, o dejadez? ¿O de nuevo estamos ante gente, los quintacolumnistas de Rubiales, torpedeando desde dentro de la Federación?
P.D.: además del relevo del seleccionador en la campeona del mundo Rocha ha implementado dos cambiosmás: en su gabinete, el de Presidencia, y en la dirección de Igualdad. En ambos casos se han elegido mujeres para ocupar los cargos.
Luis Rubiales suplicó a Jenni Hermoso: «Mi puesto está en juego, hazlo aunque sea por mis hijas. Necesito que salgas conmigo». SegúnNataliaTorrente, la periodista del digital deportivo Relevo, el entonces presidente de la RealFederación Española de Fútbol, hoy suspendido temporalmente por la FIFA, pretendía usar a la jugadora para su video de disculpas. El mismo presidente y la misma Federación que se inventaron unas declaraciones de la futbolista restando importancia al hecho. Las mismas hijas presentes en su infumable intervención, ante la Asamblea General Extraordinaria de la Federación, donde anunció que no dimitía y osó darnos clases de feminismo, pontificando sobre el feminismo bueno y el malo. Hijas a las que invocó en su tesis doctoral feminista.
Esas mismas hijas a las que negó un aumento de su pensión alimenticia a pesar de su desmesurado salario. Pasaba solo 400€ al mes. Una sentencia judicial ha doblado la cuantía (lejos de la cifra que solicitaba la madre). El fallo de la Sección Décima de la Audiencia Provincial de Valencia se produjo el pasado mes de junio y se ha conocido esta semana gracias a una información de El Periódico de España (ver enlace).
La FIFA, máxima autoridad del planeta fútbol, ha suspendido (provisionalmente) por 90 días a Luis Rubiales, el troglodita consentido durante tantos años al frente de la Real Federación Española de Fútbol. Menos mal que se ha ganado el Mundial de Fútbol Femenino para desenmascarar al personaje. Sucedió durante el acto de celebración de un triunfo histórico. Solo queda agradecer a este grupo de futbolistas, y a las que las precedieron, por esta segunda victoria que esperemos también sirva para limpiar a los obsoletos directivos de la Federación. Sería el tercer triunfo de nuestras campeonas del mundo.
La viñeta ficciona la realidad, la que observamos en la foto.
A pesar de lo afirmado por todos los medios Rubiales no dimite de la presidencia de la Real Federación Española de Fútbol. Confieso mi asombro ante la proliferación de portadas anunciando su dimisión. Un ejercicio de adivinación impropio de medios serios y habitual entre los amarillistas. Pues han patinado. Todos. ¿No conocen al personaje? ¿De verdad pensaban que un personaje como Rubi iba a tirar la toalla? ¿Ceder ante las presiones y críticas? Nunca lo ha hecho anteriormente. Y mira que tiene antecedentes y episodios a sus espaldas.
¿Estos medios nunca pensaron que los intoxicaban con la interesada filtración de su dimisión?
P.D.: el discurso de Rubiales, aún en curso, es infumable. Se presenta como víctima y pontifica sobre el feminismo bueno y el malo. ¿Quién es él para dictaminar sobre este asunto? Parece sacado del manual del perfecto machista. Rubiales cada vez que pide perdón mete la pata hasta el fondo. Además de lo del feminismo anuncia denuncias contra Echenique, Montero, Belarra y Díaz. Arremete contra Tebas e insinúa una guerra contra el gobierno (en funciones) que pretende inhabilitarte. Y ha comprometido nuevamente a Jenni Hermoso al afirmar que tuvo su consentimiento. Se llama morir matando… Porque el gobierno (en funciones) no va a permitir este desafío.
El Comité de Competición reunido ayer, durante varias horas, tomó varias resoluciones respecto a lo que ya conocemos como el Caso Vinicius. El Comité esta formado por tres juristas que representan a la Federación, la Liga y el CSD.
Con respecto a los cánticos racistas e insultos deciden clausurar parcialmente Mestalla durante cinco partidos. Cierran la zona donde acuden los ultras, algunos de los cuales también estuvieron presentes en la llegada del autobús del Real Madrid al campo (recibieron a Vini con las mismos epítetos que le brindaron posteriormente en el campo). Además imponen al club una multa de 45.000 €. Mestalla, antes de estos incidentes, ya era el estadio más multado del país (por lanzamiento de objetos).
Recuerden que ayer por la mañana, antes de conocer esta resolución, la policía detuvo a tres aficionados del Valencia (son los que identificó VInicius en el partido). En otra noticia relacionada ayer en Madrid detuvieron a cuatro rojiblancos (tres son miembros del Frente Atlético) por colgar una muñeca hinchable con la camiseta de Vinicius (como si fuese uno de los monigotes que empleaban los de Ku Klux Klan estadounidense cuando no colgaban directamente a afroestadounidenses). En cambio los incidentes del derbi en el Metropolitano del pasado septiembre pasaron a la historia y se archivaron. Fueron similares a los de Valencia, antes del partido y durante. La Fiscalía de Madrid en una decisión inexplicable alegó que los insultos «duraron unos segundos» dentro de «un contexto de máxima rivalidad» y que no se podía identificar a los autores (cuando había imágenes, amplia presencia policial y una empresa de seguridad del Atleti). Conviene recordar que esta es la misma Fiscalía que archivó las denuncias por los miles de defunciones en las residencias de mayores durante la pandemia (muchos más fallecidos que todas las víctimas de ETA a lo largo de sus más de 50 años de existencia).
El Comité de Competición, en lo que quizás sea una decisión polémica, no sanciona a Vinicius y le pega un palo al árbitro del VAR (despedido el lunes por este y anteriores incidentes). El pantallazo lo explica:
A Vini le podían haber caído de uno a tres partidos. Pero al visionar las imágenes también habría que sancionar a Hugo Duro. Su sanción debería ser superior a la del brasileño porque no es lo mismo axfisiar a alguien apretándole el cuello que pegar un manotazo. La actitud del meta (vio amarilla) también podría haber sido revisada. Sería mucho rearbitrar y no están para eso, solo sancionan. Y dejan muy claro que el árbitro principal no pudo juzgar debidamente lo sucedido porque le fue «hurtada una parte determinante de los hechos y le abocó a adoptar una decisión arbitraria». El palo al del VAR es de órdago.
Para quienes estén interesados pueden leer la resolución completa en este enlace.
¿El CSD no tiene nada que decir sobre el caso Vinicius? El Consejo Superior de Deportes presidido por el inútil de José ManuelFranco no se ha pronunciado al respecto. Y ya vamos por la décima denuncia en el caso del jugador del Real Madrid. Esta última, referida a los sucesos de ayer, supone un punto y aparte. El señalamiento del jugador marca un nuevo camino.
Se ha pronunciado todo el mundo menos el CSD. Desde el presidente de la FIFA hasta el de la Federación Española de Fútbol. Desde el Defensor del Pueblo, tortugaGabilondo, hasta el presidente del gobierno español y el jefe de estado de Brasil. Jugadores y medios han apoyado a Vinicius. Solo ha habido algunas voces discordantes: periodistas del Valencia o antimadridistas; Tebas, el presidente de la Liga, que se ha dedicado a polemizar con el jugador en redes sociales (recordemos que este personaje es simpatizante de Vox y viene de las filas de Fuerza Nueva); el portavoz socialista del ayuntamiento de Valencia; el director corporativo del Valencia y los hooligans, que a fin de cuentas son los responsables de todo esto.
En el caso Negreira el CSD también fue el último en pronunciarse. Comprendo que pedirle algo al CSD de Franco es pedirle peras al manzano. Este político de segunda fila es uno de los responsables directos del fracaso del PSOE de Madrid, del que fue secretario general (2017-2021). El uso del deporte español para aparcar a mediocres no es una buena señal.
El episodio de Vinicius no es un caso aislado. Hay bastantes precedentes. Desde uno reciente Iñaki Williams a otros en el pasado. Citaré solo tres por ser los más conocidos: Eto’o, Roberto Carlos y Dani Alves.
No voy a entrar en el tramposo debate de si España es racista o no. Pero es obvio que hay racismo en nuestro país. Si no me creen pregunten a los perros judíos, sudacas, moros, negros de mierda o a los calorros… Hasta Rubiales ha reconocido la existencia del problema en sus dominios, porque se ha manifestado en el espectáculo de masas por excelencia, el fútbol.
Para los imbéciles (por no usar una palabra más gruesa) que justifican los insultos racistas por la actitud provocativa del jugador deberían ver el video del encabezado. Lo insultan desde que llega al estadio, antes del inicio del partido. ¿Provoca por llegar al campo para jugar, con los cascos puestos y en el autobús del Madrid? Este tipo de afirmaciones, que vienen de lejos, lo único que logran es hervir el caldo de cultivo del racismo. Quienes dicen esto son colaboracionistas. Como siempre los medios tienen gran culpa de todo esto. No por amplificar pero sí por dar voz a racistas sin más tipo de explicaciones. Y si acaso las dan es para solidarizarse. Por eso este editorial de Marca me parece impecable: No es suficiente con no ser racistas, hay que ser antirracistas. Además es portada.
La tolerancia, mirar para otro lado, minimizar el problema o ser equidistante, no son buenas medicinas para combatir el racismo. Y acaba pasando lo que pasa. Añadan que las penas por estos actos de racismo en España son las más leves de la Europa de nuestro entorno.
En otro orden de cosas se ha sabido que la Federación y el Comité Técnico de Árbitros han cesado al del VAR del partido de ayer y a otros cinco más. Al de ayer por el sesgo de las imágenes que enseñó al árbitro principal y que desembocaron en la roja a Vini, obviando a Hugo Duro, el primer agresor que agarró por el cuello al brasileño como los policías blancos estadounidenses asfixian a los afroamericanos.
Estos ceses vienen a confirmar lo que muchos madridistas pensamos de todas las irregularidades ocurridas esta temporada con el VAR (siendo las más graves las varias agresiones a Vini que quedaron impunes). Además de los arbitrajes de campo que nos han perjudicado claramente.
¿A qué espera Franco del CSD para pronunciarse y tomar medidas?
Modric es baja para el partido de mañana en Sevilla frente al Betis. Lo es por acumulación de tarjetas amarillas. Siendo ingenuos podríamos decir que este descanso forzado puede venirle hasta bien. Mas quiero llamar la atención sobre un hecho sorprendente. Porque Modric, ejemplo de deportividad y así se lo reconocen muchas aficiones rivales, ha cometido apenas 16 faltas. Viene a ser una media, más o menos, de una tarjeta cada tres faltas. Por otra parte el azulgrana Gavi, que reparte más que Amazon, también se perderá el encuentro de mañana, frente al Valencia, por haber visto su quinta amarilla. Lo que canta es que Gavi ha cometido 53 faltas. Modric solo 16.
Luego ya si quieren seguimos mirando al dedo que señala la Luna y nos creemos las pantomimas de Medina Cantalejo respecto a los penaltis no señalados al Barça durante tantos partidos, las declaraciones de Sánchez Arminio sobre su íntimo amigo Enríquez Negreira, el Villarato, el atropello arbitral sufrido ante el Sevilla en el Bernabéu que desembocó en la Liga 2020/2021 para el Atlético de Madrid (algo que el hijo del varias veces encarcelado omitió en sus dos ridículas notas), los negocios entre un capitán culé y el presidente de la Federación Española de Fútbol y un largo etcétera, en el que esta comparativa de tarjetas amarillas entre Modric y Gavi es tan solo una muesca más.
El Mundano 