
La caverna mediática es inasequible al desaliento: ahora eclipsan la excelente noticia del crecimiento del PIB español con las proyecciones de la AIRef sobre la reforma de las pensiones (ayer) y el acercamiento de Txapote al País Vasco (hoy). Creía que ya se había producido. Montaron tanto ruido al respecto que lo daba por hecho. Y sí, sucedió en agosto del año pasado. Mas parece que es ahora cuando se produce. Si se lee más allá de los titulares tendenciosos vemos que la realidad se ciñe al traslado de la novia de Txapote y cuatro etarras más. Son los últimos cinco que quedaban.
Esta pasada noche no he podido pegar ojo por el informe de la AIReF. Figúrense: vaticinan la catástrofe del sistema para 2050. ¡En 2023! Pero obvian mencionar que en el acuerdo pactado con sindicatos y Bruselas se prevé una revisión para 2025. Algo bastante más realista que la apocalíptica predicción de la AIReF presidida por Cristina Herrero.
¿Quién es Cristina Herrero? Sustituyó a José Luis Escrivá al frente de la AIReF cuando fue nombrado ministro por Pedro Sánchez. Es preocupante que la labor de Herrero sea ensalzada por gurús económicos de la derecha extrema que no dan una, como Daniel Lacalle o José María Rotellar (de OK Diario, alto cargo del PP en la CAM y profesor de la universidad de los Legionarios de Cristo, la Francisco de Vitoria). A qué ahora todo va cuadrando… Esta peña ha ido fracasando en todas sus predicciones. Sus teorías han sido desmanteladas con el paso del tiempo. Como la de los efectos perniciosos de la subida del salario mínimo por ser creador de paro. En nuestro país esta no probada teoría se ha demostrado errónea. Incluso el Nobel de Economía 2021 fue para quienes desmontaron esta falacia. Tampoco hay que olvidar lo de la bajada neoliberal de impuestos. Tras el colapso de la economía británica y la caída de la primera ministra, Liz Truss, por aplicarlos, da la impresión que este asunto ha pasado convenientemente a segundo plano. Conviene no olvidarlo.
A la caverna mediática no les gustan las buenas noticias. Como la de la espectacular subida del PIB español en 2022: 5.5%. Lideramos Europa en crecimiento. Y también somos el país con la inflación más baja. Bailan alrededor de estos datos, inventando lecturas interesadas y parciales.
Si se fijan en el gráfico del encabezado verán que las subidas del PIB de los dos últimos años son las más altas desde hace 15 años (2007). Sumadas ambas tasas de crecimiento (11%) prácticamente compensan el colapso del 2020 (11,3%). Colapso producido por la pandemia y el confinamiento. Aunque sea obvio no está de más destacar la importancia de la industria turística. Tanto cuando falta (2020) como cuando se recupera la actividad. Los expertos también señalan los altos niveles de consumo interno y el incremento de las exportaciones de nuestras empresas.
La caverna mediática, sus partidos políticos y sus incompetentes gurús económicos pretenden hacernos creer que saben más que Premios Nobel, Bruselas, sindicatos e incluso China. País que es el mayor tenedor de deuda pública española. ¿Los chinos apuestan por España porque son tontos y los listos son nuestros cavernícolas de las banderitas?
Si anoche no dormí por el informe de la AIReF respecto a 2050, esta noche no lo haré por el acercamiento de Txapote, perdón, el de su novia. Un acercamiento que es a su tierra, pero en lo que a mi respecta es un alejamiento de la mía.
Me gusta esto:
Me gusta Cargando...