Hoy último día del 2018 coincide con el último post de fotos del viaje a Nueva York de la semana pasada. Pondré las que tomé paseando y que se quedaron descolgadas de las temáticas de las entradas anteriores (aunque un par ya se vieron en Facebook y/o Twitter).
A la vuelta de la esquina del hotel donde nos alojamos estaba el FIT (Fashion Institute of Technology). Los alumnos habían decorado las paredes con sus grafitis. El único que realmente me gustó fue este. La Mundana hizo esta foto al heredero.
También había una exposición en el FIT dedicada al Pink (el rosa).
El día que bajamos al Memorial y museo del 11 S aprovechamos que estábamos en el distrito financiero y nos acercamos a Wall Street y Broad Street, las mecas del capitalismo.
Simbólicamente hay tres edificios de una enorme carga y no recuerdo que hayan sido relacionados. Cuando la nueva nación se independizó, de Gran Bretaña, la ciudad de Nueva York fue la capital durante algún tiempo. El Federal Hall fue la sede del primer parlamento. Ahí juró su cargo George Washington como primer presidente (su estatua preside la entrada). Federal Hall está situado en Wall Street en la desembocadura de Broad Street (calle que sustituyó a un canal que se quedó pequeño, y que primero sirvió de embarcadero a los nativos de la isla y después a comerciantes y viajeros que llegaban desde Brooklyn –desde los tiempos en que la ciudad era New Amsterdam).
Delante, en las dos esquinas de Wall St. con Broad St., se encuentran la que fue mansión de J. P. Morgan (el financiero que sufragó la Guerra de la Independencia y proveyó de fondos a la nueva república), posteriormente ampliada para ser la sede de la Banca Morgan, y en la acera de enfrente está la Bolsa de Nueva York (el NY Stock Exchange), un edificio neoclásico en la onda del Federal Hall y que ocupa toda una manzana (desde el 1 de Wall St con Broadway).
Al pie del árbol de Navidad del NYSE encontramos otro símbolo: las siete velas del Kwanzaa, la fiesta seglar de la cultura afroestadounidense que se celebra entre el 26 de diciembre y 1 de enero. Las siete velas del candelabro corresponden a cada uno de los días de la semana que dura la festividad.
Enfrente de la bolsa y pegado al edificio de Morgan hay una tienda de Hermès. Me hizo gracia este detalle de una de las ventanas de sus escaparates.
No podía falta la foto con el toro, otro símbolo en este caso del mercado bursátil en alza. Está situado en Broadway a un par de manzanas de Wall St.
En los casi cinco años que vivimos en Nueva York entre las discotecas que se pusieron de moda estuvo el Limelight, instalada en el interior de una antigua iglesia. No era un local que frecuentásemos (solo estuvimos un par de veces). Teníamos otros sitios de preferencia. Ahora es un gimnasio. Un cruel destino para un espacio que nunca fue vanguardia a pesar de su apariencia de ruptura por ocupar una iglesia.
Los vehículos pesados que se ven por la ciudad son una pasada (incluidos los de los bomberos). Ya pudieron ver en la entrada dedicada a los transportes el camión de la mudanza de Rent-A-Wreck. La Mundana captó estos dos de NYC Brownstone, una empresa de reformas y rehabilitaciones.
Para despedir este post y el año que mejor que un brindis. Está vez es con un margarita en una taquería del Chelsea Market. La foto es del mediodía del 24 de diciembre. Hace justo una semana, pero no duden que me volvería a tomar otro. Estaba excelente (como los tacos). Atención a mi careto, entre Echanove y el emérito. Es el poder e influjo de los Juanes…