31 de diciembre de 2008
¡Qué el 2009 nos sea leve! Porque “cuando las barbas de tu vecino veas pelar, pon las tuyas a remojar”. Y si a los ricos y poderosos del planeta le vas mal –o les ha ido mal- los demás temblamos…
Ni quiero ser ni agorero ni catastrofista. Así que me centraré en los buenos deseos en día tan señalado para nuestro calendario. Y no pretendo hacer un brindis al sol.
Se piensa que el acto de brindar se originó en el siglo IV a. C., pero se realizaba por una razón bien distinta a la actual. En la antigua Roma –o en Grecia– para asesinar a alguien era usual que se envenenaran las copas, por lo que los anfitriones como símbolo de confianza chocaban fuertemente las copas con sus invitados, lo que producía que el líquido de una copa pasara a la otra. De este modo quedaba claro que no había habido ningún tipo de envenenamiento pues los dos que hacían el brindis bebían lo mismo.
Otra teoría afirma que en la antigua Roma se decía que del vino disfrutan todos los sentidos menos el oído. Con el chocar de las copas este sentido también participaba del gozo de la bebida.
Hace unos posts Rodri me recordaba una enorme metedura de pata que tuve traduciendo unos textos en “Para Vosotros Jóvenes”. Porque fue él quien tuvo que leer mi “versión”. Confundí el “toast” de brindis con “tostada”. Por mi “vinculación” e infancia madridista el Pan Toast (propiedad de Santamaría, Di Stefano, Miguel Ríos, etc.) me llevó por el camino de la “tostada”. Y Eric Saba nos sacó del error (y me llamó la atención, con toda la razón del mundo). Porque en el contexto de la canción “toast” era brindis. Y es que en los países anglosajones a menudo se suele brindar metiendo una tostada en la copa (durante las fiestas de Navidad). Por eso en inglés “toast” significa tanto “brindis” como “tostada”.
La etimología de la palabra “brindis” es fascinante. La Real Academia Española dice:
(Del alemán «bring dir’s», yo te lo ofrezco). 1. Acción de brindar con vino o licor. 2. Palabras que se dicen al brindar.
El origen del término se remonta al siglo XVI, y tiene como motivo la celebración de una victoria del ejército de Carlos V de Alemania/ Carlos I de España sobre su oponente. Según relatan los historiadores, el lunes 6 de Mayo de 1.527, las tropas de Carlos V toman de forma victoriosa Roma y la saquean. El saqueo fue algo imprevisto. Lactancio, caballero mancebo de la corte del Emperador, convencerá a su interlocutor, el Arcediano del Viso, testigo del saqueo, de que el Emperador ninguna culpa tuvo en ello y de cómo Dios lo permitió por el bien de la cristiandad. Con motivo de tal victoria, cuenta la historia, que los mandos militares llenaron sus copas de vino, las alzaron al frente y dijeron la frase anteriormente citada: «bring dir’s», yo te lo ofrezco. Este hecho, ha dado lugar a la tradición de brindar cuando se celebra algo. Claro antecedente del clásico “Arriba, abajo, al centro y pa’ dentro” de nuestros días.
Este mediodía he estado con la cuadrilla (como dirían en Bilbao) brindando por el barrio. Tres clásicos estaban cerrados (Casa Lucas, El Tempranillo y el Bilbao). Así que me he centrado en Lucio (las mejores ostras, al menos de Madrid, como podéis ver en las fotos), El Schotis (debía una cena y un tupper y junto a Casa Ciriaco sirven los mejores boquerones en vinagre), la Txakolina y el Delic (donde me ha dado un vuelco al corazón al descubrir la sustitución de Mar por Lourdes).
Al igual que una de las mayores satisfacciones que me ha producido el 2008 ha sido la vida del blog ¡por los encuentros y reencuentros! sólo puedo decir lo mismo de este paseo. En el que las “fuerzas vivas” y residentes han ido apareciendo. Bruno Galindo me ha acompañado en la segunda parte y entre nuestros propósitos está recuperarle para el mundo del tenis (necesito mejorar mi paupérrimo juego y él que fue jugador, de los buenos, puede ayudarme).
Al volver a casa me he encontrado en el buzón del email dos mensajes. Uno de Yoko (y John) y otro del Mariskal, que reproduzco:
No te Detengas
No dejes que termine el día sin haber crecido un poco,
sin haber sido feliz, sin haber aumentado tus sueños.
No te dejes vencer por el desaliento.
No permitas que nadie te quite el derecho a expresarte,
que es casi un deber.
No abandones las ansias de hacer de tu vida algo extraordinario.
No dejes de creer que las palabras y las poesías
sí pueden cambiar el mundo.
Pase lo que pase nuestra esencia está intacta.
Somos seres llenos de pasión.
La vida es desierto y oasis.
Nos derriba, nos lastima,
nos enseña,
nos convierte en protagonistas
de nuestra propia historia.
Aunque el viento sople en contra,
la poderosa obra continúa:
Tú puedes aportar una estrofa.
No dejes nunca de soñar,
porque en sueños es libre el hombre… (W.W.)
ROCK, PURO ROCK