Al «moderado» Feijóo le está quedando un PP muy apañado: pactan con Vox, defienden a Netanyahu y a Milei, para atacar a Pedro Sánchez, mientras se posicionan en contra de la ONU, porque el organismo internacional se ha mostrado contrario a las «leyes de concordia», fruto de los pactos con Vox en las CCAA que gobiernan en conjunto. Tampoco podemos olvidar su «patriotismo» (de pacotilla) cuando se opusieron en Bruselas a la concesión de los fondos de recuperación a España. O cuando recurrieron a la Comisión de Venecia para que dictaminase en contra de la Ley de Amnistía. Mas el informe de dicha Comisión fue desfavorable para los intereses de Feijóo y los suyos. Y tras una pataleta, repleta de bulos y falsedades, enterraron el suceso. Con la obvia complicidad de sus medios «comprados». Esos mismos que se declaran independientes… Será que son independientes de la verdad. Son casi los mismos del «Ha sido ETA» de los atentados del 11-M, más sus herederos.
Feijóo, que hasta donde sabemos sigue sin saber inglés y habla mal el español, no parece un lince en temas de política exterior. Quizás esto convenga a quien maneja desde la sombra los hilos del partido y se sienta en el consejo de administración de la empresa mediática difusora de bulos por excelencia. La misma empresa que pagó 787,5 millones de dólares en un acuerdo extrajudicial a Dominion, empresa de maquinas electorales, acusada sin fundamento de haber alterado el resultado electoral de las presidenciales de 2020. Las que Biden ganó a Trump, el candidato favorecido por la empresa que pagó la millonada y se hizo eco de todos los bulos trumpistas.
Desde luego el posicionamiento moderado de Feijóo no se ve en España ni fuera de nuestro país. No está del lado de la derecha moderada o centrista que pueden representar figuras como Macron, Von Der Leyen o Biden. Quienes sí tienen buena sintonía con Pedro Sánchez.