Archivo diario: enero 14, 2014

El gran combate de Muhammad Ali fue contra el gobierno de Estados Unidos

Anoche vi El gran combate de Muhammad Ali la TV movie de Stephen Frears para HBO. Con un excelente reparto y escenas de la época (las intervenciones de Cassius Clay/Muhammad Ali son reales, ningún actor encarna su personaje). La trama gira alrededor del conflicto judicial -y social- que generó la negativa del boxeador a enrolarse en el ejercito y participar en la guerra de Vietnam. El camino legal acabó en el Tribunal Supremo de Estados Unidos. No fue un camino de rosas: le desposeyeron del titulo mundial (Peso Pesado); le retiraron la licencia de boxeo y no pudo ejercer su profesión; en primera instancia el Supremo rechazó su apelación al negarse a tratar el asunto. A la segunda intentona fue la vencida aunque se precisaron dos votaciones del TS. Una vez celebrada la vista la votación reflejó un 5-3 en contra de las pretensiones de Ali. De los cinco magistrados que votaron en contra uno -el asignado a redactar la resolución- fue convencido para cambiar su voto. El novato de su equipo de colaboradores le hizo ver la luz. 4-4. Los tres que votaron a favor más el disidente tenían claro que el Supremo no podía aparecer dividido y debían buscar la unanimidad. Lo lograron. 8-0. De trasfondo la truculenta y sucia presidencia de Nixon, las revueltas raciales y las marchas contra la guerra.

De crío sentía fascinación por Cassius Clay/Muhammad Ali. Se proclamaba el más grande, the greatest. Un bocas. No se cortaba un pelo. Era Rock’n’Roll. Rápido y lucido. Tanto hablando como boxeando. Por eso recelo de los deportistas «humildes». Soy de la escuela de Ali y para nada del victímista viento que nos llega desde el nordeste de la península. De paso: ayer descubrí que sin saberlo habíamos asistido en su momento a los inicios del Rap: Clay/Ali hablaba cantando (también bailaba cuando peleaba). Rimaba para soltar sus bravatas.

En 1960 ganó la medalla de oro en los JJOO de Roma en la categoría de Semipesados. Arrojó la presea al río Ohio disconforme con lo que su país representaba en términos de derechos civiles y la segregación racial que aun existía en el sur. Como se demostró posteriormente aquel gesto no fue casual ni producto de una rabieta pasajera. Su conversión al Islam tuvo a Malcolm X como guía. Curiosamente su ingreso en Nation of Islam coincidió con la salida del activista.

Para quienes no tuvieron ocasión de verle boxear en su momento les dejo el siguiente resumen. Greatest hits, nunca mejor dicho.

En 1976 vino a España. En el enlace podrán ver el Informe Semanal que le dedicaron en mayo de ese año.

Buscando vídeos para esta entrada encontré una joyita. De cierre Sam Cooke y Ali a cappella.

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