¿Abascal o amnistía? La disyuntiva es clara. Y lo es cada vez más. Ya lo fue en las pasadas elecciones generales. No me refiero al factor «amnistía». Lo hago respecto a Abascal y Vox. Tras las autonómicas y municipales, con los pactos del PP con Vox (donde los populares se saltaron a la torera su mantra de «que gobierne la lista más votada»), quedaba claro que para millones de votantes esa coalición representaba una grave amenaza. Esos millones de votantes son los que consolidan la mayoría parlamentaria que invistió a Pedro Sánchez como presidente de gobierno. Por mucho que se empeñe la minoría parlamentaria en negar los hechos y/o cuestionar la legitimidad del nombramiento. Es de primero de democracia parlamentaria monárquica, que parece que algunos lo olvidan.
Las recientes palabras de Abascal en Argentina son una pedrada más de los linchamientos verbales del líder de Vox. ¿Actuará la fiscalía como ha hecho en otras ocasiones? Fonsi Loaiza recuerda episodios parecidos. A lo que solo puedo añadir que a quien colgaron de los pies (ya muerto) fue a Mussolini. Admirado por Meloni y asumo que también por el propio Abascal.
Se puede estar en contra de la amnistía. Por supuesto. Pero nos encontramos en una situación en la que solo escuchamos o leemos las opiniones contrarias. El bombo mediático y golpista es ensordecedor. Y nos lleva a la disyuntiva planteada: ¿Abascal o amnistía? Porque si no hubiese amnistía no tendríamos el gobierno actual. (Para alegría de los votantes de la minoría parlamentaria). Y Feijóo sería presidente de gobierno con el apoyo de Abascal y los suyos. ¿Tienen PP y/o Vox relevos de la categoría y eficacia de Calviño, Ribera, Díaz, Robles o Bolaños?
El Mundano 