Snoop Dogg se lo sigue fumando todo, todo. Por algo ha sido un empresario pionero en el mercado del cannabis y derivados. «So High» («Tan pedo») es el primer video y «Stay High» («Sigue pedo») el segundo.
Snoop Dogg se lo sigue fumando todo, todo. Por algo ha sido un empresario pionero en el mercado del cannabis y derivados. «So High» («Tan pedo») es el primer video y «Stay High» («Sigue pedo») el segundo.
Hay al menos media docena de empresas dedicadas al negocio de la marihuana que son propiedad de destacados raperos. Hasta la fecha sus negocios, más allá de la industria musical, se extendían a líneas de ropa, calzado deportivo y accesorios. El imperio de Jay-Z también abarcó el mundo deportivo (fue accionista de un equipo de la NBA, los Brooklyn Nets). Su nueva empresa, Monogram, en asociación con una firma especializada en productos derivados del cánnabis, está enfocada al cultivo. Si la entrada de Jay-Z en este mercado es reciente, pero significativa, quien ha estado ahí desde el principio ha sido Snoop Dogg. Activo en la movidas por la legalización de la marihuana, tanto para su uso médico como recreativo, actualmente cuenta con dos marcas: la web Merry Jane y Leafs by Snoop. A Snoop Dogg también se le conoce como The God of Ganja y The Undisputed Chairman of Cannabis.
Otros raperos involucrados en el negocio de la marihuana son Wiz Khailfa, Nipsey Hussle, Jim Jones, Berner, Lil Wayne y B-Real (de Cypress Hill).
No solo la cultura Hip Hop está vinculada al negocio cannábico. Los porros forman parte de las músicas populares del siglo XX, independientemente de estilos y géneros. En este sentido Willie Nelson podría ser considerado un pionero, dada su larga trayectoria y su edad (87 años). Siempre fue muy abierto al respecto (y sufrió encarcelamientos por ello). Recuerdo que en los 80 presumía de tener la mejor plantación de Estados Unidos, en su rancho en las afueras de Austin (Texas). Herbie Herbert, entonces mánager de Journey, decía que la mejor era la suya. La tenía en Maui (Hawaii). Su argumento era demoledor: había pertenecido a Jimi Hendrix, a quien se la había comprado.
Pueden consultar la lista de productos que vende Willie Nelson en la Web de su empresa Willie’s Reserve.
No está de más recordar el tremendo impacto económico que ha supuesto la paulatina legalización de la marihuana en Estados Unidos (aunque la líder mundial sea una empresa canadiense). El primer paso fue su uso terapéutico y se ha ampliado al ámbito del ocio y la diversión. En mayo del año pasado la revista Business Insider publicaba varias razones sobre el peso de la industria cannábica. Citaban que el salario medio en las empresas dedicadas al cultivo, producción y distribución de los productos de marihuana era un 10% superior al salario medio de EEUU. Luego está la creación de miles de puestos de trabajo y como se han levantado zonas castigadas por el desempleo y la recesión. Decían que hay cinco veces más trabajadores de la marihuana que del carbón. Y que para 2022 los 330 mil empleos superarían a los 286 mil de las siderurgias.
Los 52 mil millones en ventas del 2019 podrían ser 75 mil millones en 2022, superando el PIB de nueve Estados e igualando el de dos.