Repasando la lista de recomendaciones musicales de Álvaro Alonso para este verano, en ABC, descubrí este «Rompre rodillas» del puertorriqueño Guaynaa.
El concepto de «rompe rodillas» me parece un hallazgo. Sustituye a los «menéalo» y «mueve tus caderas» (Burning), que a su vez se impusieron a las expresiones referidas a movimientos de pies y pasos de baile.
Hoy Víctor Lenore publica en su columna Altavoz de Voz Pópuli un muy interesante artículo: «El lado oscuro del negocio del reguetón«. Documenta excesos, amistades peligrosas, falta de formación, etc. Y tiene a bien citar mi entrevista a John Echevarría, el ejecutivo español que desde Miami introdujo el reguetón en Estados Unidos. Se publicó en El Confidencial, gracias precisamente a la gestión de Lenore (quien entonces escribía ahí). Agradezco mucho la mención y la inclusión de parte de la entrevista en su texto.
Don Víctor establece un paralelismo entre este género latino y el rap. Ambos son músicas urbanas, pero VL se refiere al componente delictivo de los artistas y al de las amistades peligrosas. Lo que se conoció en su día como gangsta rap. En este sentido me gustaría incidir que las grandes expresiones de la música popular (o al menos las que dominaron el siglo XX desde el continente americano) tienen un trasfondo de bajos fondos y delincuencia (¿a ver quiénes eran los propietarios de los tugurios donde estás músicas nacieron y crecieron). Desde el tango hasta el blues, pasando por el jazz o el rock ‘n’ roll (en mi libro «Rock ‘n’ Roll: el ritmo que cambió el mundo» detallo el aspecto mafioso).
Recomiendo la lectura del artículo de Lenore y una vez más le doy las gracias por citar la entrevista a John.
Maluma, objeto de las iras feministas españolas, reaparece con dos temas nuevos: uno con Madonna y otro con Becky G. El protagonista del hastag#MejorSolaQueConMaluma a raíz de su «Cuatro Babys«, generó una campaña de recogida firmas para retirar el video. Acumula 875 millones de reproducciones en Youtube. Las reacciones negativas se repitieron con «Mala mía«, que a pesar de la campaña en contra lleva 243 millones de visualizaciones. No contentas con estas fallidas acciones las feministas propusieron boicotear su gira española. El resultado: llenó todas las actuaciones y el público femenino suponía el 80% del público asistente.
Madonna, que como es bien sabido es una mujer libre, valiente, independiente y liberada, ha recurrido a Maluma, para editar un sencillo adelanto de su próximo álbum «Madame X«. La canción se llama «Medellín«. De primeras te deja tirando a frío pero tras una segunda o tercera escucha te engancha. «One two, one two, one two, cha cha chá«
Si Madonna presentaba «Medellín» el 17 de abril ayer le tocó el turno a Becky G. Se trata de «La respuesta«, producido por Edgar Edge Barrera, autor de las bases musicales de éxitos como «Clandestino» (la colaboración de Maluma con Shakira), «El préstamo«, «Marinero» o la mencionada «Mala mía«, cuyo remezcla fue la primera colaboración conocida entre Becky G y Maluma. «La respuesta» es un reguetón pop que suena a pelotazo. Y su letra será del agrado de las feministas.
Los titulares implican una cosa y los textos de los artículos y crónicas, además de ponernos en contexto, suelen ser un reflejo más adecuado de la realidad y no suelen corresponderse con los titulares.
Vamos primero con el titular de El País: es indudable que este Coachella es el más latino de todos. Y J Balvin ha sido el primer artista de reguetón en ocupar su escenario principal (el sábado). Otro aspecto de la latinidad a tener en cuenta: Chile con tres artistas es el país que más ha aportado. A lo latino hay que añadir la presencia del pop surcoreano: BTS (estos sí son un pelotazo mundial) y Blackpink (que actuaron el viernes en el escenario principal a la misma hora que Rosalía).
Dando por bueno que es mejor estar en Coachella que no estar, leyendo la crónica de El País se confirman varios aspectos (que el titular no refleja y nos conduce a pensar en algo que no sucedió):
La exageración que rodea a todo lo relacionado con Rosalía en El País (y en otros medios) queda patente una vez más.
Rosalía no era cabeza de cartel del festival. Algo que a pesar de ser público (bastaba con comprobarlo en la Web del festival) se me ha rebatido muchas veces en redes.
Como no era cabeza de cartel no actuaba en el escenario principal. Su show aconteció en un escenario lateral. Por tanto no era «uno de los platos fuertes del día» como escribe Pablo Ximénez de Sandoval.
«Uno de los platos fuertes del día» congregó «alrededor de un millar de personas». Buenas son. Pero esto no es ni de lejos «copar el arranque del festival» como se afirma en el subtítulo. Quien sí parece que lo petófue el francés DJ Snake: para su hit «Taki Taki» se acompañó de tres artistas latinos tan dispares como Cardi B, Selena Gómez y Ozuna.
Leyendo la crónica descubrimos que Rosalía tampoco actuó en el horario estelar nocturno. Fue por la tarde.
No hay una sola mención a los músicos de Rosalía. Podría haberse comentado que estos brillan por su ausencia.
Está muy bien apoyar lo nuestro. Pero se hace un flaco favor exagerando la realidad. O vendiendo humo (como escribí a principios de febrero y que tanto revuelo causó la semana pasada).
P.D.: J Balvin en su actuación del sábado invitó a Rosalía para cantar «Con altura«, el reguetón que han grabado juntos. La vio más gente que en su actuación del viernes por la tarde. J Balvin ha sido uno de los triunfadores de este primer fin de semana del Coachella junto a Janelle Monáe.
Sobre lo que escribí el pasado 29 de marzo, y como añadido a lo que recoge Lenore, quisiera añadir otro argumento, que estando implícito igual no quedó claro (para Víctor sí), y confirma mi observación: para promover esta gira de festivales (y unos pocos locales escogidos en EEUU y Toronto) se necesita algo que suene. De ahí un tema nuevo, que se aleje de un álbum que no ha funcionado en los mercados que visita con su espectáculo (¿sin músicos?).
A continuación los dos extractos del artículo de Lenore en Voz Pópuli:
Mientras en España algunos intentan colonizarnos con la música vaquera, en EEUU el consumo de música latina supera al del country. La edición digital de la revista Rolling Stone ha publicado varios reportes en el que se confirma el ascenso y dominio de lo latino (que viene creciendo desde hace un par de años).
El primero de ellos hizo referencia al liderazgo de los videos latinos en youtube: los tres artistas más vistos en la plataforma han sido Ozuna (20 millones seguidores y 8.7 mil millones de reproducciones), J Balvin (18 millones, 7.1 mil millones) y Bad Bunny (13 millones, 7 mil millones). Si en 2017 seis de los 10 videos más vistos fueron latinos en 2018 fueron ¡¡¡ocho!!! Y hubo 19 clips latinos que superaron los mil millones de visionados. «Te boté» de Casper, Nio García, Darell, Nicky Jam, Bad Bunny y Ozuna fue el más visto.
Hace unos días Rolling Stone reproducía el reporte de BuzzAngle que completaba por géneros y formatos el consumo de música en Estados Unidos. En el titular de la noticia reflejaban que lo latino se imponía al country. Y en el apartado de videos solo el hip hop/rap superaba a la música latina (y por un pequeño margen de solo un punto).
En las dos imágenes vemos el consumo por géneros musicales y formatos (álbumes y canciones). En álbumes la ventaja de lo latino sobre el country es mínima (no llega al 1% y es prácticamente la misma que tiene el rhythm & blues sobre latin). Pero la diferencia es mayor en la clasificación por canciones. Casi tres puntos.
Curiosamente quienes defienden en España la música country son quienes más desprecian y odian el reguetón. En el país originario del country los artistas anglos se pelean por grabar y colaborar con los latinos. Aquí los defensores de la música vaquera denigran a los latinos, a pesar de tener más raíces culturales con ellos que con los rednecks. Vivir para ver…
En este 12 de octubre, Día de la Hispanidad, la música debería tener un rol destacado. Especialmente cuando la música latina se está imponiendo en el aún dominante mundo anglo. Ya no solo son éxitos y ventas, factores importantes, es que las principales estrellas tanto blancas como negras quieren colaborar con las latinas (Cardi B, Pharrell Williams, Drake, Will Smith, Beyoncé, Justin Bieber, etc.). Y se está estableciendo un duelo artístico interesante a más no poder: Puerto Rico vs. Colombia. Son las dos principales fuentes de artistas latinos urbanos que están partiendo la pana. Como me contaba John en la entrevista que le hice para El Confidencial (fue el ejecutivo que introdujo el reguetón en EEUU) la escena se trasladó de Puerto Rico a Colombia. Pero la isla se mantiene fuerte por ese fuerte vinculo que mantiene con Estados Unidos (son un estado asociado) y los lazos comerciales y artísticos que les une a Miami (gracias a la apuesta inicial de John).
Voy a poner unos videos. Empezaré con mis dos temas favoritos del año: «X» de Nicky Jam y J Balvin (Puerto Rico) con 1.298 millones de visionados en seis meses y medio y «Clandestino» de Shakira con Maluma (Colombia), con casi 173 millones de reproducciones en dos meses y medio:
Y para acabar otro temazo, que va camino de convertirse en el pelotazo del año y probablemente pueda superar en mis preferencias a los dos anteriores. Es del boricua Bad Bunny con Drake, quien se desenvuelve estupendamente en nuestro idioma: «Mía» la estrenaron ayer y en apenas 24 horas ya ha superado los 10 millones de reproducciones.
Son solo una pequeña muestra de la música que ahora mismo está tambaleando el imperio anglo!!!
El texto resume una larga conversación sobre la faceta discográfica de John en Miami y su decisivo rol en la introducción del reguetón en el mercado de EEUU.
Es mi primer escrito para El Confidencial, medio al que profeso admiración y respeto y que además siempre me ha tratado de cine. Agradezco a Víctor Lenore la colaboración prestada, sobre todo en la edición (ha ganado en agilidad y concreción) y la selección de videos.