Importante victoria del Real Madrid en Vallecas. La trascendencia del resultado se notó en los abrazos de los jugadores, cuando se anotó el único gol del partido y se confirmó en los abrazos de toda la plantilla y cuerpo técnico al finalizar el encuentro.
El estado del campo de juego del Rayo era muy deficiente. Más propio de un estadio de regional que de uno de la máxima categoría. Algo que me extraña porque el equipo de Iraola se distingue por su buen trato del balón.
Ancelotti, con Marco Asensio consolidado en el once, solo presentó una novedad, obligado por la baja de Alaba: Nacho fue titular. Y como siempre cumplió a la perfección.
Antes de cumplirse el primer minuto una buena combinación colectiva del Madrid terminó con un pase filtrado de Carvajal a Asensio. Pudo ser el 0-1 pero Luca Zidane con su buena salida achicó la portería y evitó el tanto. Al filo del minuto 5 el balear dispuso de otra buena ocasión. Su chut salió centrado y no cogió la rosca pretendida. En este caso el pase fue de Benzema.
La primera jugada de Vinicius fue un buen remate en el 8 y medio. Su disparo cruzado se fue fuera por poco y fue rápidamente contestado por los locales. El disparo de Bebé desde su banda izquierda pegó en el lateral de la red. Esta acción despertó al Rayo que en las dos jugadas siguientes finalizó buscando portería, aunque se les fuesen fuera y alta.
El primer cuarto de hora fue rápido por el ritmo que imponía el Madrid. El repliegue del Rayo también ayudaba a consolidar el dominio madridista.
Sergi Guardiola cabeceó abajo poniendo en dificultades a Courtois en el 17. El bote impidió al belga atrapar la pelota y felinamente se hizo con su propio rechace, anticipándose a Guardiola.
Luca Zidane sacó un remate marca Marco Asensio en el 23. Lo desvió a córner. Dos minutos después otro cabezazo de Guardiola creó peligro para los locales. Se fue fuera por poco.
Un robo de balón de Álvaro García en el 33, en el vértice del área, dio lugar a una buena ocasión. Su remate se fue alto. El Rayo había adelantado sus líneas y dificultaba la salida de balón del Madrid.
Casemiro hizo el 0-1 en el 38 y medio, su primer gol de la temporada. Ganó por alto un balón centrado por Kroos. Y la empalmó a la red tras el bote. La revisión del VAR señaló fuera de juego de Case y el tanto quedó anulado.
El alargue fue de dos minutos. En el primero Luca Zidane volvió a achicar la portería. Esta vez frente a un cabezazo de Benzema (quien creo que estaba en fuera de juego).
El marcador no se movió y llegamos al descanso con el 0-0 inicial, en una buena primera parte. Se jugó con mucha intensidad, a pesar de las pocas faltas señaladas (seis locales por una del Madrid). En este aspecto el árbitro estuvo complaciente en mi opinión.
El Madrid de esta primera mitad fue distinto al de partidos anteriores. Ganó casi todos los duelos individuales. Se jugó prácticamente en campo contrario y buscaba finalizar las jugadas. No se movió el marcador por el buen desempeño del portero rayista, Luca Zidane.
No hubo cambios y volvieron los mismos 22 para la segunda mitad.
Al poco del arranque Balliu se jugó la amarilla frente a Vini (en la primera mitad se jugó la roja por un manotazo sobre el brasileño). El lateral derecho se fue de rositas las dos veces.
A los cinco minutos ambos banquillos mandaron calentar a varios jugadores.
A Vinicius le frenaron un remate en el 51. Dio la impresión que Zidane estaba superado (y tapado).
El peligro rayista llegaba desde las bandas, buscando la cabeza de Sergi Guardiola, quien se imponía por alto. Aunque la mejor intervención de Courtois fue a un cabezazo de Mario Suárez.
Casemiro vio la amarilla en una jugada que a mi no me pareció falta. Óscar Valentín parecía que tendría que abandonar el campo. Entró la camilla y se volvió de vacío. El jugador siguió en el campo y Fede Valverde entró por Case (min. 60).
Balliu finalmente vio la amarilla en el 64 por chocar contra Vini. Acto seguido se retiró Valentín y entró Pathé Ciss.
A una internada de Modric, por la posición de Vinicius, siguió otro remate de cabeza de Sergi Guardiola.
Nos acercabamos al minuto 70 y el reloj comenzaba a correr en contra del Madrid.
Iraola realizaba un doble cambio ofensivo en el 72, a pesar de retirar a Guardiola. Entraban Isi y Falcao por Bebé y el mencionado Guardiola. Pensé que sería para frenar las subidas de Militao, quien continuamente se incorporaba a las jugadas de ataque, no solo para los saques de esquina. El central no se amedrentó e insistió en sus subidas. De hecho pudo hacer el 0-2 en el 90 con un remate de cabeza picado abajo en un córner.
Rodrygo entró por Asensio en el 78.
A 10 minutos del final el milagroso Courtois salvó una doble ocasión, a remates de Trejo y el rechace que recogió Álvaro García. El primero fue a bocajarro y para el segundo tuvo que incorporarse desde el suelo y lanzarse para cubrir la zona próxima al palo por donde presumiblemente iría el remate.
La entrada de Fede Valverde aportó dinamismo al centro del campo merengue. Tanto en ataque como en recuperación del balón. En el gol (min. 83) intervinieron los dos jugadores que entraron de refresco. Valverde se hizo con la pelota en banda derecha. Combinó con Rodrygo, de interior derecho. El brasileño se la dio a Benzema, en la frontal del área, a un metro de la media luna. Benzema vio a Vinicius, cambiado de banda, y se la pasó. Rodrygo estaba a su lado pero no hizo ademán de jugar la pelota y esta fue toda para Vini. Se internó en el área entre dos defensas. Luca Zidane salió para achicar. Y cuando, a punto de llegar al vértice del área pequeña, todos -incluido el meta- pensábamos que Vini iba a chutar nos sorprende y la pasa atrás a Benzema. El francés entraba por el centro en solitario y solo tuvo que empujar el balón a la red. 0-1.
El Rayo efectuaba un doble cambio para buscar el empate. Ancelotti respondía dando entrada a Camavinga y Ceballos por Vinicius y el tuttocampista Modric.
Se añadieron 6 minutos a los que hubo que sumar un minuto más por lesión de Carvajal..
A 12 partidos del final de esta Liga amarrar estos tres puntos era vital. Y ahora a esperar a ver que pasa en el derbi sevillano. Como mínimo mantendremos la ventaja de seis puntos.