La escalada y el karate debutaban en Tokio 2020 como disciplinas olímpicas y las primeras medallas de oro de la historia de los JJOO han sido para Alberto Ginés y Sandra Sánchez. El cacereño de 18 años cumple los 19 la última semana de octubre. La talaverana de 39 años celebrará sus 40 el próximo mes. Son los primeros campeones olímpicos de escalada y karate. Con estos dos oros España entra en el Top 20 del medallero (empatada con Suiza).
Me disponía a ver la semifinal de las chicas de waterpolo frente a Hungría (somos sus bestias negras), pendiente de la actuación de Sandra Sánchez, la mejor karateca de kata de la historia. A su impresionante historial de 6 europeos consecutivos, 3 mundiales y cinco años seguidos como la n.º 1 del ranking mundial (que la valió para entrar en el Guinness de récords por sus éxitos internacionales), ahora tenemos que añadir este oro olímpico. El primero y el único, porque el karate (o kárate, que ambas formas están aceptadas) no volverá a formar parte de los JJOO. No me pregunten por qué. Desconozco las razones. Tenemos judo o taekwondo como disciplinas olímpicas más no el karate. Los países organizadores tienen la facultad de invitar especialidades deportivas a sus Juegos. Japón es la cuna del karate y la elección parecía lógica. La brava Sandra Sánchez se enfrentaba a la heroína local, su gran rival de los últimos años a quien siempre venció. Y atención: gracias a este oro su marca será inalcanzable hasta que el karate vuelva a unos Juegos.
Con 2-0 a favor de España en el primer cuarto frente a Hungría, La 1 partió la pantalla para ofrecernos la kata de Sánchez. La intensidad, el altísimo nivel de concentración y las voces que profería nuestra karateca te dejaba pegado a la pantalla. No parecía concebible que no ganase. Mas los jueces locales… La finalista japonesa también lo hizo muy bien, pero no tanto como nuestra campeona.
La excelente noticia de la medalla de oro de Sandra Sánchez, nuestra segunda en estos Juegos, coincidía con las chicas de waterpolo poniendo distancia en el marcador (5-2 al descanso). El resultado final, 8-6, es la mejor prueba de las dificultades del segundo tiempo. En el que nuevamente destacó Pajarito Laura Ester, nuestra magnífica guardameta. También hay que mencionar la media docena de tiros que se estrellaron en los postes de la portería húngara. Los tres goles de Anni Espar y los dos de la debutante Elena Ruiz (16 años) también contribuyeron a la victoria. En la final nos espera Estados Unidos, que ya nos vencieron 8-5 en la final de Londres 2012. Nuestras waterpolistas tienen la ocasión de buscar la revancha en la final del sábado (antes de la del fútbol). Será su segunda final en su tercera participación en unos JJOO (en Río 2016 caímos en cuartos). No se las puede pedir más. Por su parte los chicos del waterpolo afrontan hoy su semi contra Serbia, a quienes derrotamos por un gol en la fase de grupos.
Sandra Sánchez y las chicas del waterpolo comparten un denominador común: la tenacidad. Aparte del talento. Esperemos que Damián Quintero, también primero del ranking mundial en kata masculina, corra la misma suerte que Sandra Sánchez. Su final también coincide con el waterpolo.
Decía en las redes sociales que ganar el oro de karate en su tierra de origen es como si un cantaor japonés ganase el premio de cante en un festival de Triana. Imaginen si al oro de Sánchez añadimos el de Quintero.
La escalada se estrenaba en estos JJOO, como el skate. El cacereño Alberto Ginés fue la sorpresa del día. Su oro en la combinada elevaba la cuenta de España a tres oros. Y dos en el mismo día. Para la historia quedará como el primer medallista de oro en esta especialidad.
En la primera prueba, de velocidad, su especialidad, quedó primero superando al rival checo. En la segunda, la de los bloques, no pudo superar las dificultades y bajó a la cuarta posición de la clasificación general por su séptimo puesto en esta prueba. La tercera, su favorita, consistía en subir los más alto posible sobre una pared de más de 15 metros de altura. Quedó cuarto. A medida que los demás concursantes finalizaban quedaba claro que la medalla estaba asegurada. Faltaba por saber de qué tipo. Cuando el austriaco desbancó del primer puesto de esta fase final al checo Ginés lograba la primera posición de la combinada.
Estos dos oros y la final de la selección femenina de waterpolo compensan de sobra el mal sabor de boca que nos han dejado nuestros piragüistas y la previsible derrota de Los Hispanos en balonmano (si logran el bronce se despiden de Tokio 2020 ganando el último partido). No hemos tocado chapa en ninguna de las cuatro finales disputadas. Un jueves con dos oros y un presea asegurada deja paso a un viernes y un sábado que podrían ser muy buenos.