El noruego Børge Brende, presidente del Foro Económico Mundial que organiza los encuentros de Davos, es un socialcomunista bolivariano. Y de los peligrosos porque a pesar de pertenecer al partido conservador noruego (con el que ha sido ministro en varias ocasiones) va y se atreve a preguntarle a Pedro Sánchez: “¿Cuál es la receta del éxito del reinicio de la economía española?”. No contento con semejante osadía agregó: “El paro está bajando, crecen las inversiones y también ha habido nuevas reformas. Muchos economistas dicen que no se pueden hacer reformas laborales de pensiones y que haya crecimiento. Ustedes lo han conseguido”. Para rematar la infamia con un insolente “¿Pueden otros países aprender de su ejemplo?”,
Asumo que se harán cargo de la satisfacción de Pedro Sánchez. Y del estruendoso silencio de la caverna mediática respecto a esta intervención. Escuché a Angélica Rubio, directora de El Plural, recomendando al señor Brende que se vaya preparando. Porque le pueden caer palos por todas partes desde nuestra imparcial prensa de derechas. Sería la única forma en la que darían cobertura a esta intervención.
El Foro de Davos reúne anualmente a las elites del planeta. A Núñez Feijóo, que pretende hacer de la economía su baza electoral y nos alerta de catástrofes por venir, no se le ha visto en Davos. Ni a Ayuso. Tampoco a ninguno de sus pandilleros callejeros y tabernarios (el eufemismo para describir a sinvergüenzas y borrachos). Por supuesto tampoco está prevista la invitación a Abascal.